Mujeres y ciencia: un paso más hacia la igualdad

Durante siglos, las mujeres han sido las grandes olvidadas dentro de la comunidad científica. Uno de los ejemplos más significativos es la química Rosalind Franklin, que junto con James Dewey Watson y Francis Crick, desveló la morfología de las moléculas de ADN. Franklin nunca recibió el Nobel, al contrario que sus colegas de profesión, aunque sí recibió numerosos reconocimientos póstumos.

Otro ejemplo lo encontramos en una de las figuras más prominentes del ámbito de la bioquímica en España. Margarita Salas, genetista molecular, bioquímica y profesora universitaria, realizó numerosos avances relativos a la investigación del genoma humano y descubrió el virus bacteriófago Φ29, durante la época en la que fue discípula de Severo Ochoa.

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Sin embargo,  sufrió una gran discriminación por parte de sus colegas e incluso de algunos profesores. Tanto ella como Franklin fueron dos ejemplos de mujeres científicas que encontraron dificultades para poder avanzar en sus investigaciones y desarrollar sus carreras.

Redes de mujeres científicas

 

Afortunadamente, hoy en día existe una gran concienciación en cuanto a la igualdad en distintos ámbitos y numerosas asociaciones se han puesto manos a la obra para solventar este problema, ofrecer apoyo a otras mujeres que quieren dedicarse al mundo de la investigación científica y sobre todo, animar a las niñas y jóvenes de todo el mundo a escoger este tipo de carreras, mediante ejemplos de mujeres inspiradoras con las que se puedan sentir identificadas. De hecho, el 11 de febrero se celebra el Día de la mujer y la niña en la ciencia, a raíz de una resolución de Naciones Unidas que se aprobó en 2015.

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Estos son algunas de las asociaciones dedicadas a la colaboración entre mujeres científicas:

  • La Unión Internacional de Física Pura y Aplicada (IUPAP), cuenta desde 1999 con un Grupo de Trabajo de Mujeres en Física dedicado a realizar un seguimiento de la situación de las mujeres dedicadas a la física en sus ámbitos de trabajo y mejorar sus condiciones en caso necesario. Este grupo además organiza numerosas conferencias internacionales, para fomentar el intercambio y la cooperación entre científicas de distintos países.

 

  • En España, encontramos la asociación AMIT (Asociación de Mujeres Investigadoras y Tecnólogas), con sede en Madrid, que con el apoyo de algunas fundaciones ha establecido una base de datos de científicas para hacer accesible el talento de cientos de mujeres de todas las áreas de la ciencia.